BALANCE 2014

Aunque no soy yo muy de hacer balances cuando termina un año, sino más bien en septiembre cuando termina un curso escolar y comienza uno nuevo, dado que el año anterior me apunté al TODAY 4/1/14  me apetece publicar este balance que no había escrito pero sí pensado un poco, y digo un poco, porque en estas fechas no he tenido ocasión de ponerme seriamente a pensar en estas cosas.

He empezado el año perdida en un pequeño pueblo de la Alpujarra, con buena compañía y desconectada de casi todo, ya en casa,  poniéndome al día y cargada de fuerza y energía positiva para comenzar el nuevo año, y siendo consciente de la suerte que tengo y todo lo bueno que hay en mi vida, aunque queden cosas que faltan por llegar.

Así que ahí voy con mi balance personal.

El 2014 no ha sido un año bueno en general, como ya sabéis quienes me leéis, ha habido altibajos,  pérdidas y  momentos bastante dolorosos, pero ha sido en cambio un año de crecimiento personal, de autoconocimiento, de aprender a valorar cada vez más la felicidad que aportan las pequeñas cosas y los momentos especiales en nuestro día a día, de apreciar las buenas compañías y de alejarme de personas tóxicas o que no me aportaban nada, de incorporar otras. Un año de decisiones, a veces, difíciles y de romper con viejos esquemas y algunas "tradiciones".

Mi primer propósito está claro que no lo cumplí, así que tocará repetir objetivo en 2015, eso sí, con un obstáculo menos por delante (gracias Remorada por recordármelo en un comentario).

Para seguir el orden en el que me planteé dichos objetivos continúo con el de mantener el blog, cosa que dudaba bastante pero que he conseguido. No tengo una rutina y unos días en que publico sí o sí (no funciono así y me costaría un montón) pero creo que la actividad ha sido bastante, y me gusta así, escribo cuando puedo y me apetece, y así continuaré.

Lo de tomarme la vida con más calma lo he conseguido, quizás un poco a la fuerza y a base de palos, pero conseguido queda, y también con algo de trabajo y disciplina, en los últimos meses he ido incorporando a mi vida la práctica de la meditación y aunque me queda mucho por aprender y me falta ser más disciplinada o constante, estoy muy contenta con el resultado.

Lo de comer más sano y moverme más, salvo en situaciones o momentos excepcionales (como estas fiestas en las que he comido como si no hubiera mañana) ha sido un reto superado.

He disfrutado muchísimo de la lectura, aunque no he leído más libros que el año pasado, me quedo en 27, que es el número que aún estoy leyendo, pero igualmente estoy satisfecha, la mayoría de las lecturas me han gustado bastante, y no se trata de cuantificar, sino de disfrutar o fluir con estos ratos lectores. A este respecto, El puente invisible de Julie Orringer, El Cid de José Luis Corral, La vida cuando era nuestra de Marian Izaguirre y El corazón helado de Almudena Grandes han sido las que más he disfrutado.  

En cambio lo del cine o ver más pelis en casa no ha ido muy bien, la verdad es que a menudo o no encuentro tiempo o ganas, así que queda pendiente para el próximo curso. 

Lo del orden, en la misma línea, fifty fifty, no es que sea el colmo de la organización y el orden pero algo hemos mejorado, aunque queda por hacer, la verdad.

No sé si he pasado o no más tiempo con la gente que quiero, pero sí que he pasado menos con la que no quiero, el matiz me parece importante, por lo que me doy por satisfecha.

De aprender a coser, guitarra o natación, "rien de rien", vamos ná de ná...Con el yoga he tenido escarceos en el último mes y es algo que espero poder continuar en éste porque me ha gustado mucho la experiencia. Y lo de coser lo solucionaré pronto porque he sido buena y me voy a autoregalar una máquina de coser, por cierto, como ando un poco perdida sobre esto, cuál comprar  y demás, se admiten sugerencias. 

Sí he paseado más y hecho senderismo, de hecho ha sido así como hemos terminado y empezado el año, y otras rutas nos esperan en éste que comienza, además conociendo cada vez a más gente con estos mismos intereses y que nos proponen (a mi costillo y a mí) cosas interesantes.

Este año 2014 hemos viajado a Lisboa, Madrid, Cuenca, han sido varias las escapadas a Granada, La Alpujarra o Sevilla, y por supuesto a nuestros pueblos respectivos y pequeñas escapadas cercanas. Han quedado pendiente Londres, Marruecos o Alemania, pero estoy segura de que 2015 será mejor también a ese respecto. 

He conocido a gente estupenda, disfrutado de pequeños placeres, en este sentido me ha gustado mucho participar en el reto de los #100HAPPYDAYS, que estoy a punto de terminar, he aceptado otros retos, como el del mes sin compra (que me ha ayudado bastante a ser más selectiva con las compras y a ser más consciente sobre en qué gasto mi dinero), formado parte de lecturas conjuntas, ganado sorteos, hecho manualidades, en fin, que he disfrutado muchísimo con pequeñas cosas.

El 2015 intuyo que será un año estupendo, así lo deseo. De momento lo empezamos muy bien tras pasar unos días magníficos en buena compañía, he conseguido que fueran las navidades que me apetecían y quería vivir, en cierto modo, me he reconciliado con ellas, y además mi costillo empieza el año con un cambio importante en lo laboral.

A los que segúis por aquí y me alegráis cada entrada con vuestros comentarios, y con algún presente recibido estos días, daros las GRACIAS y desearos un 2015 próspero y lleno de momentos felices.