martes, 10 de mayo de 2016

PENSIÓN LEONARDO - ROSA RIBAS


He de reconocer que elegí este libro por su portada, lo vi un día en el Kindle Flash de Amazón, llamó mi atención y lo compré. Me tentaron tanto su portada, como el saber que pertenecía a Nuevos Tiempos de Editorial Siruela, que en general suelen ser un acierto, y por supuesto, también su precio.

No era un libro que en un principio hubiese pensado reseñar, porque aunque es una lectura que me ha gustado no es de las que me han entusiasmado y estoy deseando venir a aquí a recomendarla. No osbtante es una historia bastante entrañable, y quizás a alguien que me lea pueda gustarle más que a mí, y por otro lado, porque me viene bien para seguir con el Reto 25 españoles, que dicho sea de paso, no llevo muy bien a estas alturas del año (pero no me voy a agobiar con eso, si llego bien y si no también).

Pensión Leonardo es un alojamiento modesto en el barrio barcelonés de Poble Sec, a mediados de los sesenta, regentado por una familia humilde, la de Lali, una niña de doce años, a través de cuyos ojos y sus palabras vivieremos esta historia.

Se trata de la historia de una familia, la de Lali, con un padre tuerto (por una herida de guerra), su madre, y sus tres hermanos (Mercedes, Jaime y Bernardo), y una historia familiar llena de secretos que Lali tratará de ir descifrando. Es también la relación con otros personajes, Peret y Luciano, que regentan el bar donde comen los huéspedes de la pensión, Julia, la amiga "pija" de familia pudiente y Amado, un chico menor que ella que será su amigo y compañero más fiel. Y por supuesto los distintos huéspedes, los fijos y los provisionales, que irán pasando por la pensión y entrando en la vida de la niña.

Lali es una niña lista, soñadora y sensible, en un ambiente que no acompaña precisamente todas esas cualidades.

Varias líneas del libro definen muy bien la vida en el establecimiento y las relaciones que se establecen.

"La pensión no era un paraíso un arcádico, sino el lugar en el que ocho hombres vivían diferentes formas de desarraigo".

"Cada familia guarda su repertorio de silencios compartidos".

La historia es entrañable, y aunque yo nací a mediados de los 70, muchas de las cosas que se cuentan me resultan familiares. Pero es una historia triste y son unos personajes, en su mayor parte, desgraciados. Sin embargo, ¿qué es lo que no me ha gustado de la novela? Pues desde mi punto de vista, como lectora, hubiera deseado ahondar más en unos personajes, que, insisto, a mi juicio, se quedan cortos. Una tiene ganas de concerlos más, de profundizar más en ellos, en sus historias, sus sentimientos y resulta que cuando terminas la historia te quedas con ganas de más.

Está bien escrita, porque Rosa Ribas, a quien no conocía, escribe bien, tiene frases que he ido subrayando mientras leía, evoca situaciones y emociones de una forma estupenda, y las descripciones consiguien situarte en el lugar o la escena que relata, pero a mí me sigue faltando ese algo que está en los personajes. Y quizás también, no estoy en un momento en el que me apetezca leer tristezas.

De todos modos, es fácil y ameno de leer, y la historia te atrapa (sin llegar a engacharte), así que si sentís curiosidad, leedla y me contáis.

A esta lectura le han seguido Le llamé corbata, Un monstruo viene a verme, Una madre y Yo antes de ti, que he disfrutado más, sobre todo estas dos últimas. Todas ellas quedan pendientes de reseñar en los próximos días (o semanas o meses...).






2 comentarios:

  1. Es curioso cómo a veces una portada puede obrar maravillas y llamarnos la atención irremediablemente... No me sonaba esta novela, pero creo que podría gustarme a pesar de que no profundice mucho en los personajes...

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  2. No me llama, aunque la foto de la portada tiene su punto.

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