Pocos libros me han enganchado en los últimos tiempos tanto como éste. Lo he leído durante las vacaciones de semana santa. Lo empecé en Sigüenza en la última etapa de nuestro viaje e hice el viaje de vuelta (de copiloto, por supuesto) hasta Sevilla leyendo todo el rato, no podía parar.
No conocía nada del libro, pero lo vi en un kindle flash de Amazon y no me resistí, e hice bien porque es de los libros que estoy segura de que releeré.
Advierto que no es un libro fácil, como bien dice su autora en una entrevista que le hicieron en Babelia, "Soy cruel porque la realidad es cruel".
La historia que se narra es la de un país, Irán, desde la época de los sahs a finales de los sesenta, pasando por la revolución, la guerra y llegando hasta nuestros días. Es la la historia del país a través de la historia personal de una niña, Masumeh, que junto a su familia dejará su ciudad natal, Qum, para instalarse en un Teherán más moderno o cosmpolita y algo más alejado de las tradiciones, o en palabras de Mahmud, hermano mayor de la protagonista, "en Teherán, la fe y la religión son algo secundario".
La principal aspiración de Masumeh será estudiar, algo difícil en el seno de una familia dominada por las ideas de los hermanos mayores, que piensan que una mujer no necesita más que una educación muy básica y casarse con un hombre pudiente y respetable que la pueda mantener. Durante todo el relato Masumeh luchará contra esa imposición, aunque le resultará difícil. El mayor de sus "pecados" consistirá en conocer al joven Said, a quien encuentra cada mañana en la farmacia camino al colegio, y enamorarse de él como una niña (como la joven que es). A partir de ahí muchos de sus deseos se verán truncados y su historia se torcerá. Como no quiero adelantar nada porque es un libro que merece mucho la pena descubrir por un mismo, no voy a seguir contando.
Me ha gustado mucho descubrir a esta autora, que podría haber vivido perfectamente una historia similar a la de la protagonista de su libro. Realmente ella no es escritora, sino investigadora, se dedica a la sociología, hasta que un día decidió convertir esas estadísticas, en las que trabajaba, sobre las mujeres de su país en esta novela, y con ello llegar a un público mucho mayor y dar a conocer la situación de las mujeres en Irán, o países con un gobierno y una sociedad similar. El libro se ha visto con problemas a la hora de pasar la censura.
La historia de Masumeh es la de muchas mujeres en Irán, sometidas a las leyes de su país, a una sociedad que las castiga y que la ve como seres inferiores, pero también sometidas primero a sus padres y hermanos, a sus maridos e incluso a sus hijos. Toda la histora es una pugna entre rebelión y lucha y rendición o sometimiento. Asistiremos a momentos muy difíciles en la vida de muchos de los personajes. Personajes muy bien trabajados, con muchos matices, que van evolucionando, o a los que vamos descubriendo a lo largo de la historia. A alguno de ellos pasaremos de odiarlos al principio para empezar a entenderlos al final de la historia.
Yo lo leí en dos días, me atrapó de forma irremediable desde la primeras líneas. He de decir que me atrae la historia de este país, de hecho Persépolis de Marjane Satrapi también es una historia que me encanta, aunque mucho más ligera, quizás por ser una historia gráfica, también llevada al cine.
La historia comienza así:
"Sin tener en cuenta el honor y la reputación de su padre, mi amiga Parvaneh hacía cosas sorprendentes. Hablaba en voz alta por la calle y miraba los escaparates, incluso a veces se paraba y me señalaba los artículos expuestos. Daba igual que le repitiera: "Vámonos, es de mala educación", no me hacía caso. En una ocasión, hasta me gritó desde la acera de enfrente y, por si fuera poco, me llamó por mi nombre de pila. Sentí tanta vergüenza que rogué que me tragara la tierra. Gracias a dios no había pro allía cerca ningún hermano mío, porque no sé qué habría pasado si me hubieran visto".
Y a continuación algunos fragmentos que me han gustado especialmente (seré breve):
"Hermano, una muchacha tienq que ser buena por dentro. No se trata de que lleve un hiyab adecuado".
"¿Qué clase de tradición era aquella, Dios mío? Primero habían estado a punto de matarme por haber intercambiado unas pocas palabras con un joven al que conocía desde hacía dos años, sobre el que sabía muchas cosas [...] y de pronto pretendían que me metiera en la cama con un desconocido sobre el que no sabía nada y que únicamente me inspiraba miedo".
Creo que no hace falta insitir en que os lo recomiendo encarecidamente.
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| La autora |
Ya me quedé con ganas de leerlo cuando me hablaste de él este fin de semana, y después de esta reseña ya tengo claro que toca leerlo sí o sí. Además me has recordado también lo mucho que me gustó en su día "Persépolis".
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