sábado, 26 de mayo de 2018

VISITAMOS CARTEIA Y JIMENA DE LA FRONTERA

Ayer os dejaba una entrada sobre lo que me apetece hacer ahora que me siento bien, y hablaba sobre todo de viaje y movimiento, sin pasarme aún. Llevábamos unos días planificando una visita al yacimiento arqueológico de Carteia con unos amigos, pero su hijo se puso enfermo y decidimos postponerlo. No obstante el costillo y yo teníamos muchas ganas de ir, porque entre otras cosas, llevamos 7 años aquí, lo tenemos a media hora y pasamos por allí muchísimas veces, para ir a Algeciras, para nuestras escapadas a Marruecos, para ir a Tarifa, y cada vez que vamos a visitar a mis padres a Sevilla, así que anoche nos acostamos pensando que de hoy no pasaba, y así ha sido.

Tras ver la información sobre visitas en la web de la Junta, ayer llamé, pero un poco justa de tiempo y no me lo cogieron. Esta mañana al levantarnos ha sido lo primero que hicimos, para concertar la visita guiada, y ha merecido la pena.

Lo primero de todo ha sido un rico desayuno tardío en Los Rondeños, un bar cerca de casa donde se desayuna opíparamente, y luego hemos salido rumbo a Carteia, que como os digo está a media hora.

En este enlace podéis encontrar la información necesaria para una visita. Y ahora os resumo brevemente qué es y que veréis en Carteia.

Es un yacimiento arqueológico romano muy importante en la provincia de Cádiz, se encuentra ubicado en el término municipal de San Roque, muy próximo a la refinería. En importancia, similar a Baelo Claudia (Bolonia) pero desde mi punto de vista, mucho más desconocido y poco promocionado. Es interesante que Carteia fue la primera colonia latina fuera de la península Itálica, por lo que sus habitantes adquirieron la ciudadanía romana.

Fue primero una ocupación de época fenicia, más tarde cartaginesa, hasta que la derrota en las Guerras Púnicas de estos últimos dejó el territorio en manos romanas. ¿Qué vamos a ver allí? 

- Las termas.
- Al menos dos domus (viviendas romanas).
- El templo.
- Una enorme pila bautismal.
- Piletas de salazones.

Las termas
El yacimiento es mucho mayor, y es una mínima parte, ésta, la que se ha excavado, y en breve se podrán visitar también los restos del teatro y el circo. (Para entonces haremos otra visita).

De épocas más recientes, la Torre del Rocadillo, del siglo XVI, época de Felipe II, que es una torre de vigilancia costera, y un búnker de la II Guerra Mundial, ya mucho más reciente en el tiempo, y en el que podemos entrar. A mí esto último me ha sorprendido y gustado a partes iguales, es decir, mucho.
No eran tontos estos romanos
La visita es gratuita, el entorno natural es precioso, si obviamos la refinería e imaginamos cómo pudo ser antaño, para mí es fácil imaginarlo, hago un photoshop mental y elimino de las vistas las grúas, las chimeneas y demás. Los jardines son muy bonitos y bien cuidados, con mucha variedad de especies vegetales. No os cuento más, porque Alba, la chica que nos lo ha mostrado os lo explicará mucho mejor, desde aquí, aunque no creo que me lea, darle las gracias, porque lo hace estupendamente. Yo me he venido con la idea de llevar a mis alumnos de 1º de ESO, dudo que pueda ser este curso, pero sí para el próximo.

Acanto
Como hemos salido de allí cercanos a la hora de almorzar, el costillo decidió que con media horita más de trayecto nos escapáramos a Jimena de la Frontera, lugar que ya hemos visitado en otras ocasiones, incluso pernoctando allí, y al que hemos hecho alguna escapada senderista, y ha sido todo un acierto.

Jimena es un término municipal muy amplio, situado en la comarca del Campo de Gibraltar, y que abarca los núcleos de Jimena de la Frontera, Los Ángeles (Estación de Jimena), San Pablo de Buceite y San Martín del Tesorillo (este último más próximo a nuestro lugar de residencia).

Jimena se puede visitar perfectamente en una mañana, aunque también está muy bien para pasar un fin de semana de turismo rural conociendo sus senderos, rutas y alrededores. ¿Qué ver o hacer en Jimena? 

Como esto no pretende sustituir ninguna información turística, yo os voy a hablar de mi propia experiencia. 

En Jimena es visita casi obligada, su castillo, y acerca del mismo tenéis un reportaje mucho más amplio en el blog del costillo

La Casa de la Memoria de la Sauceda, que nosotros aún no hemos visitado (aunque lo subsanaremos en breve) por no haber coincidido con sus horarios de apertura.  
 

Las Reales Fábricas de Artillería, de época de Carlos III,  que se ven haciendo una ruta muy recomendable por las riberas del río Hozgarganta.

Pasear por las calles del pueblo y ver su arquitectura y las preciosas macetas con flores que lo adornan también es una opcion recomendable. (Abstenerse aquellos a los que nos os guste subir cuestas).


Para comer, mi lugar preferido es El Anón , con una terraza preciosa y una comida estupenda, y que es una opción magnífica si queréis pasar la noche, ya que también es hostal, sobre este punto, tengo buenas referencias, pero nunca me he alojado allí.

Tomar una cervecilla, un café o un buen desayuno en la plaza del pueblo, junto a la torre de una antigua iglesia, hoy inexistente. La plaza es la de la Constitución, y la iglesia fue la de Santa María la Coronada. La plaza ocupa el solar de esta antigua iglesia. El lugar para comer que más nos gusta en la plaza es el Restaurante Pastor, cuyo propietario, Antonio, a quien hemos conocido hoy, nos ha parecido un señor entrañable, gracias al cual, mañana podremos desayunar unos estupendos molletes de agua, que no podéis dejar de probar si visitáis este pueblo. Otra de las cosas ricas que llevarse a la boca es el piñonate, un dulce, heredado de la tradición árabe, bastante contundente, y calórico. Sobre el mismo, podéis leer más aquí.Os digo lo de contundente porque cuando lo compré en otra visita anterior, en una panadería frente a la plaza (Almepan), la señora me dijo que había elegido un trozo muy grande, y una vez en casa, comprobé que no le faltaba razón.

Mollete de agua, a medio camino entre el mollete antequerano y el pan marroquí

El día nos acompañó porque ha hecho un tiempo estupendo, el sol necesario, pero sin el calor que pronto tendremos por estos lares, y una brisa muy agradable.

Visitar Jimena a mí me gusta porque es otro mundo a muy poca distancia de la Costa del Sol, su gente es entrañable y acogedora, y aunque yo soy urbanita 95 %, me gusta el ritmo lento de los pueblos, el trato cercano de quienes lo habitan y el sosiego y la calma que se respira en sus calles, a las de Jimena, me refiero.



9 comentarios:

  1. Hoy mismo habéis estado y hoy mismo públicas este post !!!! Eso es tomarse en serio lo de escribir más en el blog y lo demás tonterías. Qué lugar tan bonito y sí, los romanos nunca han sido tontos, se buscaban bien los buenos lugares en los que asentarse.

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    1. Sí, lo hice por dos motivos, el entusiasmo y el que a veces cuando lo pospongo me dejo entradas en el tintero.

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  2. Será porque me siempre me parecieron muy lejanos, pero los romanos ME FLIPAN.

    Los molletes también xD

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    1. Si vienes de visita al sur te prometo ambas cosas, ruta arqueológica romana y por supuesto, molletes, ninguno como estos. Tan entusiasmada me vio el señor del bar que me dio su número de teléfono para cuando vuelva a subir a Jimena tenerme preparado un cargamento de esos molletes, tantos como quepan en mi congelador, jaja.

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  3. ¡¡¡Qué me dices!!! Esa pedazo de visita romana tan interesantísima ¿¿¿gratis??? Pues ya sabes lo que va ahora mismito a la lista de cosas para la próxima vez que vayamos al sur, a ver si con suerte podemos también visitar ya de paso el teatro y el circo. Y oye, los molletes de Jimena tienen una pinta tan estupenda que según te he leído me han sonado las tripas. Hala, me voy a comer, jajajajaja.

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    1. Por algún blog te he leído una visita a Cádiz en septiembre, es lo que tiene esta red de redes, ja ja, para entonces seguro que ya se pueden visitar circo y teatro, e igual hasta tienes compañía, je je. Yo también voy a comer en breve.

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  4. Tengo una enorme asignatura pendiente. Solo conozco Sevilla y muy poco, fui en septiembre de 1992 para la Expo.
    Y ahora estamos barajando una idea un tanto utópica, y es la de trasladarnos al sur.
    En fin, ya veremos.
    Pronto publicaré en mi blog.
    Besos y hermoso post.

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    1. Te ánimo a bajar al sur, Sevilla ha cambiado mucho desde la Expo. Si os trasladáis al sur, mejor la costa, que en el interior son muchos meses de calor.
      Me alegra que te guste el post. Y si vienes al sur, ya sea temporal, o definitivamente, ya sabes.
      Un beso.

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  5. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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