viernes, 26 de octubre de 2018

RAMEN VEGETARIANO

He subido en varias ocasiones a mi cuenta de Instagram la foto del ramen que suelo hacer en casa, y como varias personas me han pedido la receta, y sobre todo a petición de Conchy de Pasión por la Vida, he decidido hacer esta entrada. Las ganas de volver al blog también me acompañan, pero el mucho trabajo y la falta de tiempo no me dan mucha tregua.

De la receta del ramen tengo dos versiones, y ambas me gustan mucho, aunque la primera, requiere de mayor planificación que la segunda. Ahí voy con ambas.

Ramen de ayer
Lo primero que necesiamos en un buen caldo (vegetal en mi caso), y es lo único que requiere tiempo.

Para la primera versión utilizo un caldo, fruto de la cocción de garbanzos en olla lenta, o Crock-pot. La receta es muy simple, pero requiere planificación previa, cojo una cantidad grande de garbanzos (la capacidad de mi olla es 3.5 l) los dejo un día (24 horas) en remojo, con agua, y otro día en el mismo recipiente, pero sin agua (así empiezan a germinar). Cuando están listos, los pongo en la olla junto a agua hasta arriba, un poco de sal marina, la parte verde (que la gente suele tirar) de los puerros y dos o tres zanahorias, 10 horas en alta y sale un caldo delicioso y sustancioso, y los garbanzos blanditos y muy ricos. La receta no es mía, es de Carmen, de Baelo Claudia Saludable, he tenido la suerte de hacer dos cursos con ella y estoy en varios grupos de Facebook de cocina con ella. Sé que os soprenderá tanto tiempo para cocer unos garbanzos, pero sale un caldo tan rico, y teniendo en cuenta que se hace solo, merece la pena.

La otra forma, pues ayer me entraron las prisas, y queríamos cenar ramen, así que utilicé la Thermomix para hacer un puré de calabacines, le puse cebolla (previamente pochada, de mi Batch Cooking semanal), una patata pequeña, calabacines, unos cuantos champiñones, mucha agua (toda la que cabe en la Thermo) y sal, y de ahí, además del puré, me salió un caldo de verduras muy rico.

También podéis hacer caldo de verduras en una olla tradicional aprovechando las verduras que tengáis en casa.

Otra versión, con el miso al fondo
Listo el caldo, yo lo pongo esta vez al fuego en una ollita, y le añado "tropezones", ayer le puse, tofu ahumado en daditos pequeños, cebolleta picadita en circulitos muy finos, y le añado los fideos soba que utilizo (son los que más me gustan, son de arroz, calabaza y jengibre, libres de gluten, ligeritos y con un sabor y textura muy agradable.

Los fideos o tallarines que añado, esa es la medida para dos pesonas

Lo dejo que hierva y luego bajo el fuego y lo dejo unos 7 u 8 minutos. En ese tiempo pongo agua en un cazo y cuando está en ebullición añado dos huevos que dejo hervír sólo durante 8 minutos (pongo un temporizador) para que salgan en ese punto que me gusta en el que se han cuajado pero no están duros.

Cuando retiro el caldo del fuego le añado una cucharada grande de miso, que es un condimiento que aporta aroma y sabor, hecho a base de soja fermentada, que además de ser bueno para la flora intestinal, tiene un sabor muy rico, yo uso el más oscuro, y el que aporta un sabor más intenso, pero podéis probar con otros. Diluimos esta pasta en el caldo y añadimos el huevo, y listo para comer.

Aspecto del miso
Es un plato completo y delicioso, a mí me encanta, es calentito y en las noches frías, que empiezan a llegar, sientan estupedamente.

La base es el caldo y el miso, el resto de lo que podéis añadir queda a vuestra elección, yo suelo poner algas (wakame por ejemplo), trocitos de tofu o tempeh, cebolleta, cebollino o puerro muy picadito, maíz o champiñones, es cuestión de ir probando con aquello que os guste más.

Si lo hacéis contadme.

Espero que os guste.

martes, 2 de octubre de 2018

ME GUSTA - ME DISGUSTA

Este verano, durante el periplo vacacional por centroeuropa, hicimos bastantes trayectos en tren (me encanta viajar en tren, por cierto), y en el que nos llevaba de Viena a Praga me dio por escribir esta lista, creo que entonces no pensé demasiado en si la publicaría o no, pero de repente me apeteció hacerlo. Son dos listas, simples, sin demasiadas explicaciones, la primera de cosas que me gustan, la segunda, de cosas que detesto.

ME GUSTAN: 

- Las plantas
- Los libros
- El olor de la tierra mojada (particularmente desde la ventana de mi habitación en casa de mis padres)
- Viajar en tren (ya lo dije arriba)
- Cocinar
- Los pendientes
- Llevar mochila en lugar de bolso
- El té siempre muy caliente y la limonada muy fría
- Flotar, nadar, y el agua en todas sus versiones. Me siento cómoda en este elemento.
- Recibir postales

DETESTO: 

- Las flores o plantas de plástico
- Las chanclas para caminar fuera de casa o la piscina
- Los grupos de whatsapp
- Los trámites para embarcar en los aeropuertos
- Hacer maletas
- Que hagan ruido al masticar
- La gente a quien no le gusta ni hablar ni comer (existen, conozco alguna)
- Tener que oír la música de quien lleve al lado
- Estudiar en las bibliotecas o lugares públicos
- Las prendas de ropa que adornan pero que carecen de utilidad

Y vosotros, ¿qué os gusta por encima de todo? ¿qué detestáis? Contadme.