martes, 19 de mayo de 2015

BUSCANDO EL SOSIEGO

Tengo este espacio, esta pequeña mesa de camilla, un poco abanonado en los últimos tiempos, y no precisamente porque no me apetezca escribir, es más, lo necesito, para encontarme, para fluir, para desconectar, y la mayor parte de las veces para ordenar mis ideas.

Últimamente tengo una vida social demasiado intensa, que no es me queje, pero entre eso y el final de curso y escapadas casi cada fin de semana siento que "ando un poco hecha un trapo", voy apagando fuegos y necesito calma, calma para retomar actividades placenteras, como la lectura, la costura, escribir, cocinar despacio...y como sólo depende de mí, voy a ir frenado el ritmo y aprendiendo a decir no y a centrarme en lo que verdaderamente me interesa o me apetece. Hoy lo hablaba con una compi y amiga del trabajo y se reía, me decía que no podía evitarlo, porque ve que me hago buenos propósitos pero luego me apunto a un bombardeo, y razón no le falta.

Necesito tiempo para estar conmigo misma, para mimarme, para cuidarme y también para dedicar más tiempo de calidad a mi relación de pareja, ya que mi costillo también sufre las consecuencias, la mayoría de las veces gustosamente.

Sigo en el proceso de conseguir mi objetivo número uno, que a estas alturas ya sabéis cuál es, y creo que para ello también es importante un buen estado mental y anímico y por supuesto energía, jeje.

El otro objetivo que me marco a corto plazo es el de poner orden en el caos en el que ando sumida, y es que lo del orden, si no me pongo a ello, va a volver a ser mi asignatura pendiente, y últimamente es algo que me agobia mucho. He empezado por hacer cambio y limpieza de armarios y me he deshecho de cosas que por un motivo u otro ya no quería (regalando, tirando, donando...) pero sigo teniendo muchas cosas y mucho caos, la habitación de los horrores va cada vez peor, con ropa por todas partes (aún no he completado el cambio de temporada, otras están pendiente de arreglos...), el escritorio con montañas de cosas (y digo cosas porque hay de todo, pelis, cables, cd's, discos duros, papeles médicos y objetos varios), así que cuando busco algo pierdo un tiempo infinito. Si hubiera un servicio o un coaching, o algo parecido, que me ayudara a organizar mi casa y mi ordenador y resto de dispositivos digitales, gustosamente pagaría por ello, ha llegado un punto que no sé por dónde empezar. Se admiten sugerencias.

En próximas entradas quiero hablaros de libros, contaros nuestas últimas escapadas, el concierto de Jorge Pardo y un sinfín de cosas que me rondan esta cabecita.

Amenazo con volver, pronto.



8 comentarios:

  1. Nena, ante todo mucha calma, que ya sabes que la vida son rachas y ahora te toca la de apuntarte a un bombardeo, como dice tu amiga. Pero oye, a veces las cosas surgen así y tampoco vamos a andar haciendo remilgos, ¿no? Con que te centres en tu objetivo número uno seguro que tú misma irás regulando el ritmo para adaptarte, y de paso a tu costillo aunque él lo sufra gustosamente. ;-) Lo del servicio de organización de casa, mesa, armarios y zarandajas digitales yo te lo hago gratis; no tienes más que decirlo.

    ResponderEliminar
  2. Amiga Espe, tus servicios de organización (yo soy un desastre) a cambio de sol, playa, piscinita y habitación doble con manutención. Si no te asustas del caos, claro, jeje. Un besote.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Tú tranquila que yo del caos ya no me asusto. ;-)

      Eliminar
  3. Ánimo, te entiendo perfectamente porque me siento muy parecido... pero son épocas, todo pasa, así que pronto estaremos centradas otra vez.
    Besos!

    ResponderEliminar
  4. Ay, lo del orden y la acumulación a mí me da mucho estrés. Me leí en navidad el libro de Marie Kondo de The life changing magic of tyding up y me ha cambiado mucho el enfoque de todo. Tiré un montón de cosas, no te lo puedes imaginar y es verdad que ahora soy más feliz. Acabo de mirar y lo han traducido ya al español: http://www.amazon.es/La-magia-del-orden-Herramientas-ebook/dp/B00QSIV6L0. No sé si te interesará. Parte de la idea de que uno solo debe tener lo que de verdad le hace feliz, todo lo demás es prescindible y no aporta nada.

    Por cierto, te he contestado en el blog a lo de las muñequitas. El agujero lo cierro cosiendo a mano, a veces queda mejor y a veces peor.
    Un beso

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Acabo de ver lo de las muñequitas, tendré que ir perfeccionando la técnica. En cuanto a lo del orden, en su día te leí en una entrada que habías leído ese libro, incluso recuerdo haberlo buscado en Amazon, te iba a preguntar si te había sido útil y ya veo que sí, así que creo que me lo voy a pedir, a ver si me ayuda. Un beso, guapa, y buen fin de semana.

      Eliminar
  5. Respira... cuesta descartar cosas, terminar otras y relajarse a veces, pero tu puedes ^^
    Si te digo que por aquí ni hemos empezado con el cambio de armario... me da pánico pensarlo, jajajaja, me tocará descartar ropa como hago cada año, siempre guardas cosas que al final no usas y es una pena.

    ¡Un besote1

    ResponderEliminar

Cuéntame